Antoni Clavé
Barcelona, España, 1913 – Saint-Tropez, Francia, 2005
Formado en la Llotja de Barcelona con Fèlix Mestres, Josep Mongrell y Ángel Ferrant, al terminar la Guerra Civil se exilió en Francia, donde vivió hasta su muerte, primero en Perpiñán, después en París y en Saint Tropez; desde allí obtuvo un amplio reconocimiento internacional. Pintor, grabador y escultor, se le asoció con la llamada Escuela de París, junto con Pablo Picasso, Juan Gris, Joan Miró o Antonio Saura. Si bien inicialmente su obra era más gráfica y también escenográfica, desde principios de los años cincuenta se dedicó a la pintura. Transitó por un realismo intimista, por el expresionismo y el simbolismo, hasta situarse en el informalismo y la abstracción experimental. Lo más característico de su producción desde 1975 fueron los fondos que simulan papeles doblados y superpuestos, representados en trampantojo, y lo que él llamaba papier froissé, que incorporaba el aerosol sobre papeles arrugados.
Fue uno de los artistas catalanes contemporáneos con mayor presencia internacional, con exposiciones y reconocimientos, como el premio de la UNESCO en la Bienal de Venecia de 1956. Entre sus retrospectivas, destacan las presentadas en el Musée national d’art moderne de París (1978), el Pabellón Español de la Bienal de Venecia (1984) y el espacio Can Framis de la Fundació Vila Casas (2013).